Yokai
En los últimos años, el conocimiento sobre los yokai se ha expandido por todo el mundo a través de la cultura pop, atrayendo a curiosos de todas las edades. Yokai, en japonés, puede referirse a cualquier fenómeno inexplicable. Históricamente, su concepto se asocia a narrativas populares, como leyendas y mitos, que suelen formar parte de las creencias locales en pueblos y ciudades de todo Japón. Se cree que el término se creó para explicar de forma mística o sobrenatural aquello que a menudo era inexplicable, como los fenómenos naturales y las casualidades.
Debido a la actual popularización de los yokai a través de personajes de dibujos animados y juegos electrónicos, mucha gente los relaciona con criaturas terroríficas o fantasmagóricas. Pero es importante recordar que este término no debe asociarse necesariamente con algo malo. Las narrativas de cada ser sobrenatural pueden variar mucho, y hay múltiples versiones e interpretaciones tanto de sus apariencias como de sus personalidades, que van desde lo despiadado hasta lo dulce e incluso lo divertido.
Baku
Los yokai, que son parte del folclore japonés, también pueden adoptar distintas formas y actuar de manera diferente según la situación. Se destacan los elementos de la naturaleza, la fauna y la flora, y pueden considerarse criaturas mágicas, tanto por sus poderes como por sus características físicas. La apariencia del baku (獏), por ejemplo, está conformada por partes de diferentes animales: cuerpo de oso, cabeza de elefante, ojos de rinoceronte, cola de buey y patas de tigre.
Según algunos relatos, a pesar de que tiene un aspecto más bien monstruoso, el baku es uno de los grandes protectores de la humanidad. Se alimenta de los sueños humanos, especialmente de los malos sueños. Además, se dice que los espíritus malignos evitan acercarse a los lugares habitados por el baku, lo que hace que este yokai siempre se asocie a la salud y la buena suerte.
*Esta ilustración es sólo una representación entre tantas otras posibles del yokai baku.
